A golpe de rabieta



Que el mundo está lleno de desagradecidos, eso lo sabemos todos, que el que no llora, no mama, también. El mundo del escribir se rige por estas dos máximas tan populares, que hoy traigo a tenor de un caso que descubrí ayer mismo. Para empezar debemos partir de la premisa que el que escribe tiene que llorar para recibir su gratificación, como que la mayoría de los que leen, no valoran el esfuerzo del que se sienta a dar a las teclas. Pues bien, resulta que una persona, llamémosla X, tiene una página Web, digamos Y, donde muestra y publicita sus libros, diremos de ensayos. Esta persona, que cuenta con un curriculum más o menos importante y que ha publicado varios libros, se ha enfurruñado con el mundo.
Está harto que le regalen los oídos, que le digan lo fabulosamente bien que escribe, y que luego estos halagos no se materialicen en las ventas de sus libros. Es más, según parece, su último libro sólo ha vendido dos ejemplares (¿Me dijeron dos? Joer, es que ni su familia le ha comprado. Ahora, los que sí que estarán contentos serán sus editores) Debido a esto, ha decidido tomar decisiones drásticas y ha decidido abandonar el blog que tiene para abrir otro donde sólo se le podrá leer previo pago de 30 euros anuales, a lo suscripción pero sin la vajilla de regalo. Afirma que si tan bien escribe, si tanto gusta a los demás, la gente no debería tener reparo en abonar este dinero para apoyar sus escritos, y esto lo hace en plena crisis (Hay que tenerlos cuadrados).
Por un lado, como persona que escribe y regala contenidos (sin valorar la calidad de los mismos, pues eso no me compete a mí) entiendo parte de esta rabieta. Yo mismo he protagonizado alguna, cuando tras meses escribiendo, no he recibido ni un mísero comentario que me diga que hay alguien ahí, aunque sea del más allá, y he abierto el blog con la espada en el aire dispuesto a cargarme el mundo. No obstante, me parece extraño lo que dice y hace esta persona (A la que no pienso publicitar gratuitamente –qué me pague 30 euros por ello-). En primer lugar afirma necesitar el dinero, porque él, a diferencia de muchos de nosotros que nos levantamos a las seis de la mañana, curramos, volvemos a casa, atendemos nuestras obligaciones y después, al final del día, disponemos de un poco de tiempo para dar a las teclas, él vive de lo que escribe. Esta primera aspiración ya es mucho más de lo que la mayoría tendrá algún día y si, por lo pronto, ya logra vivir de ello puede darse con un canto en los dientes.
Su principal queja era el bajo índice de ventas de su última publicación. Y de verdad, entiendo que se indigne por ello, porque ni "los suyos" han cumplido. A mí también me sabe a cuerno quemado cuando tengo que ir insistiendo para que los amigos y familiares compren un ejemplar (y lo mío es de aficionado), aunque mis últimas experiencias ya me han hecho pasar de este tema. Ya ni pido que me lean. Vale que la familia y las amistades están, en cierto modo, "obligados" a comprar/leer aunque sea por quedar bien, pero no puedes enfadarte con el resto del mundo porque no lo haga. Curiosamente hablo un poco de esto en mi próximo artículo en la revista Groenlandia (que está a punto de salir, y es gratis): si el mundo editorial está en manos de cuatro personas, al final todos leen lo mismo.
España edita al año 80.000 libros diferentes, un gran abanico de posibilidades para regocijo del lector, aunque al final sólo se leerán unos 50. Los demás irán a los cubos de reciclado (de ahí la importancia de los servicios de impresión bajo demanda o los aún no instaurados e-books). Pero hay que tener en cuenta que el lector debe elegir, no lo que lee, sino lo que compra. Si sólo puede comprarse dos libros, tendrá que pensárselo mucho, pues tendrá que descartar 79.998 (aunque, bueno, en realidad el lector desconoce el 99% de los títulos). He aquí la cruda realidad de lo difícil de este mundo, dónde sólo los elegidos son los que de verdad viven de esto, mientras el resto sigue aporreando el teclado por pura vocación.
Es difícil entender esta realidad, más cuando has entrado en trance, y que dejándote llevar por la ira, dices que vas a cobrar por las visitas al blog. Yo llegué a decir que no iba a poner Epsilon III en versión digital para obligar a la compra en papel (pero luego caí en la cuenta que me cabrearía aun más cuando viese que ni con esas aumentaría las ventas – y también el poco sentido de esto cuando ni con esas me llevo beneficio-), por eso creo que con los días todo volverá a su cauce, supongo que cuando vea que nadie paga los 30 euros. Porque, vamos a ponernos serios con esto: hay millones de autores con blogs de entrada libre, hay periódicos digitales que dan información gratis, gente que lee y escribe por puro placer de dar a los demás lo que sienten ¿Y esta persona pretende que paguemos por sus contenidos? Él ya cobra por ir a mesas de autores a hablar, él ya cobra por los ejemplares de sus libros, y que ahora pretenda cobrar por su blog. ¡Es de caraduras!.. o cómo mínimo de presuntuosos.
Viendo casos como éste, siempre me detengo a pensar en toda la gente que, como yo, regala su imaginación y sus sentimientos en relatos, novelas, poesía, música, fotografía... La gran mayoría por placer y sólo piden una cosa, que llegue al otro lado y les digan que les gusta, un comentario de ésos como los que recibe esta persona y que no le bastan porque no van acompañados de un puñado de euros... Y yo aquí pidiendo comentarios... En fin, los voy a quitar. Ahora pondré un apartado de quejas, que parece que es lo único que funciona. A ver si tengo más éxito así.

3 comentarios:

  1. Muy acertada tu opinión y la descripción de cómo viven muchos de los autores esta crisis del mundo,Todos nos apuntamos al comentario plácido siempre que sea gratuito, me gusta tu sincerad y tu vehemencia rayando en la colleja directa. Yo soy capaz de entender y ponerme en la piel de cada uno, pero los matices personales de cada cual no los entenderá nadie. Un beso, y ya sabes que para mí no es ningún compromiso ni obligación el leerte, ya sabes que adoro tu forma de escribir y te apoyaré siempre. Soy una mujer de palabra y lo sabes,

    besos de tu hermana, Eva

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  2. Hola guapo, te había perdido la pista y ahora que te encuentro te veo en esto del blogspot. Cuanta razón tienes en eso de que cobrar por entrar en un blog es muy feo, y mas cuando tienes la suerte de que encima te publiquen los lbros. Hay autores famosos que tienes sus espacios web Y NO COBRAN. como se atreve el tipejo o tipeja en cuestion en hacer eso. Espero que se quede sol@. Ale, me pongo en modo lector que veo que tengo curro (eso me pasa por mala y no haberme dado cuenta del cambio de web. Ya decía yo que no ponías nada nuevo en la otra página) Besitos!

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  3. Eva, es que es lo que hay. Supongo que sería el calentón inicial y con el tiempo volverá a lo de siempre. Si no, es que es un auténtico gilipollas... así de claro. Respecto a lo de las lecturas familiares, no hace falta que lo aclares... sé perfectamente quien lee y quien cuelga el libro en el estante... y quien directamente huye el tema XDDDDD pero vamos, que no puedo exigir nada. Es algo que tiene que salir por iniciativa propia y por gusto, sino es mejor que pasen. de ahí que no insista con estas cosas.

    Saritaaaaaaaaa, guapetona!!!. Ya te estaba echando en falta, creí que me habías abanonado... Por cierto, esa foto que has pùesto? ¡¡Eres la mujer de Rogger Rabbit!!! Welcome back! y ale, ale, a leer que hay currele. Besos!!!

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