GH: a quién pueda interesar

Ahora la pierna nos la ponen a nosotros... ¡Ay que joderse!

Tras la entrada de ayer, y poder ver la gala en diferido por Internet, pues el martes no pude, hoy vuelvo a mi entrada semanal sobre el veterano reality de telecinco. Y hoy, además, voy a titular con permiso de Pepe de esta manera “A quién pueda interesar”, título que él utiliza en todas y cada una de sus entradas en el blog de granhermano.com, algunas de ellas son muy interesantes. Lástima que escriba con tan poca frecuencia.

El motivo para titular de este modo no es otro que para dirigirme a esos amigos que se pasan por aquí y que de verdad les interesa este tema. Ya me han vuelto a trasladar ciertas quejas por escribir de Gran hermano en el blog, como si el hacerlo mermara cierta calidad. Pero jamás pensé que hubiera calidad que salvaguardar y yo escribo a la imagen y semejanza de mis gustos personales. Si coincide, genial, si no os espero otro día cuando hable de algo que interese más. Además, hay a quién le interesa leer esto.

Pero yendo al grano, al reality de reencuentros. Hemos vuelto a tener una semana llena de cosas que contar: peleas, conversaciones muy interesantes e incluso bromas. Tal vez, por fin estamos viendo en esa casa algo que echamos tanto en falta en la undécima edición: esas risas y esas conversaciones kilométricas dónde se extraía la esencia de cada uno de los participantes.

La sorpresa llegó al inicio de la gala con el abandono voluntario de Melania y Piero, pero antes debemos pararnos en todo lo que dio de si la semana, recalcando como más importante lo que ya algunos llaman la primera lección del manual del ganador. Pepe y Ainhoa pasaron una intensa noche solos, hablando. Y hablando de Gran hermano y la visión de cada uno. Fue una conversación magistral dónde el inventor del nomineitor intentó hacer entender a Ainoa que aquí todos juegan. Unos mejor, otros peor, pero jugar no cabe la menor duda. Le hizo especial hincapié en cómo debe tratar y analizar las situaciones, que ya llevamos muchas ediciones para que todos estemos de vuelta. Su posición en el grupo mayoritario, lo cual no les beneficia, el estar todo el día con el critiqueo, el discutir por cosas que son irrelevantes. Fue algo genial que quedó reflejado en el minutado de dicho día hasta las cuatro de la mañana, aunque en el gato encerrado lmedina continuó hasta que la conversación se agotó.

Era curioso ver cómo Pepe aportaba datos sobre la posición de cada uno, recriminaba a Ainhoa el estar dando en bandeja el premio a Melania y Piero con su actitud, pero ella no lo entendía. La de Alcorcón hizo gala de todos los clichés ya muy vistos: que si ella va de frente, que si ella siempre es así, que si es visceral, que si no le importa el premio, y Pepe le fue rebatiendo todos y cada uno de sus argumentos. Al final algo debió entender, pues no tardamos en verla con Nico aleccionándole con las conclusiones de la conversación, aunque entonces parecía que se trataba de conclusiones a las que había llegado sola cuándo fue Pepe quién se las puso en bandeja.

Ainhoa y Pepe formaban una graciosa pareja. El Pepe frío y calculador parece enternecerse con ella y ella se deja querer. Hasta el martes, momento que una discusión los separó. Y es curioso, el motivo de la bronca fue Arturo, Indhira y Mercedes Milá. Al final se acaloraron, dijeron de todo y la amistad que los unía, se rompió ¡Qué poco dura todo en Gh! Anoche Pepe se disculpó con ella pero Ainhoa no le ha creído. Asegura que lo hace por estrategia, sobre todo ahora que ella se ve fuerte. Error garrafal por su parte, pues aún a día de hoy no sabe por qué las dos primeras semanas no fue salvada y ahora sí. Su capacidad de análisis es nula y se cree que sus apoyos han crecido por méritos propios, cuando en realidad crecieron ante la expulsión de Bea. Si Bea siguiera en la casa, ella no hubiera sido salvada.

Otra que tampoco tiene capacidad de análisis es Melania. Melania abandonó por varios motivos, según dijeron al súper: ella tiene que seguir con la carrera y Piero tiene compromisos laborales. Sin embargo, días atrás vimos como analizaba la situación, y muy mal, con Amor. No veía a su amiga ganadora, cómo tampoco se veía ella. El motivo era la situación que poder que podría ejercer el grupo mayoritario en cuanto cayese en la terna de nominados. Y estoy seguro que así hubiera sucedido. De hecho, ya contaba con Amor fuera del juego para esta semana. No obstante, Melania y Piero han sido los únicos que llevan dentro desde el principio y sin estar nominados. Pepe entró más tarde y Ainhoa estuvo en peligro dos veces. Ella no ha perdido el apoyo de una parte del público, y estoy convencido que de seguir, hubiera quedado cómo mínimo en segunda posición. Pero su capacidad de leer el juego es escasa y creía que terminaría perdiendo el apoyo. Al final tenía razón: no sabe jugar a esto.

Tras la salida de Melania se produjo lo previsible, la expulsión de Amor (Es curioso, pero siempre menciono a una parte de la pareja y omito la otra). Así, el grupo minoritario se extinguió de la casa dejando a un grupo que se lleva más o menos bien, y sin un objetivo que los una, así que… pronto se iniciará una nueva guerra (Si es que no ha empezado ya con Ainhoa y Pepe enfrentados). La salida del grupo minoritario pone una curiosa situación. Si Melania se hubiera quedado, hubiera absorbido los votos de Amor haciéndose más fuerte, pero sin los melanios un porcentaje de votos considerable deberá reestructurarse entre las cuatro parejas que quedan, con Jorge y María José como nuevos invitados.

En mi previsión, diría que Ainhoa será la peor parada en esta redistribución. No concibo la idea de un grupo de gente amplio que apoye a Melania y a su vez a Ainhoa, por lo que ésta será quién menos votos sume. Chiqui tampoco era muy amable con la de Morella y compañía, aunque Ana sí lo fue. Pepe fue muy cordial y evitó que su posición de poder les sirviera de pretexto para hacer campaña. Melania hasta terminó simpatizando con él, eso por no contar a una Raquel Lo que afianzó una curiosa amistad con Amor. Tal vez por esto, creo que los de GH7 serán los más beneficiados a esperas de lo que pueda suceder con GH1.

Ya sólo quedan cuatro parejas, por lo que cada movimiento puede ser decisivo. Los nuevos entran con mucha información, pero con el problema de que tampoco son muy carismáticos. Su entrada en la casa puede quedar reducida en una semana a menos que las estrategias de los demás prefieran mantenerles un poco más. Ana y Chiqui no consiguen conectar con el público… y encima ahora que la batalla ha estallado entre GH5 y 7, la atención no se centra en ellas. La audiencia terminará posicionándose a favor o en contra de cada uno de ellos, olvidando en cierta medida a las dos parejas que quedan. Diría que GH1 y 10 se verán las caras en la sala de expulsión… y lo que suceda después ¡A saber! Ya sólo quedan dos semanas, tal vez tres: hagan sus apuestas.